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Los cambios hormonales en la mujer, favorece el incremento de grasa corporal por lo que es necesario mantenerse activa


Escrito para fitness por Montserrat Astigárraga Serra

Las mujeres suelen ganar peso con el paso de los años. Sin embargo, son muchas las razones por las cuales sucede este incremento de masa grasa. Recordemos que en la pubertad empieza a presentarse un incremento en la síntesis de hormonas (estrógenos), lo cual produce un mayor almacén de grasa en los adipocitos (células almacenadoras de grasa) situados en pecho, cadera y glúteos transformando el cuerpo de niña al de una mujer. La razón de este cambio tiene que ver con la cantidad de grasa necesaria para la ovulación y para el inicio de la menstruación.

Sería lógico pensar que al haber una disminución de hormonas y perder la capacidad de procrear, esta grasa ya no fuera tan necesaria y de esta manera se perdiera mucho peso durante la menopausia, sin embargo, existen muchos trastornos relacionados con esta etapa, cómo la pérdida de memoria, fatiga, mayor riesgo a sufrir osteoporosis o sufrir bochornos. Todo esto se presentan cuando los estrógenos empiezan a descender y como algunas de sus consecuencias los adipocitos o células grasas se expanden permitiendo una mayor cantidad de grasa en su almacén.

Otra de las consecuencias de los bajos niveles de estrógenos, es la disminución de neurotransmisores como la serotonina, esta se relaciona con el bienestar, de ahí el porqué de repente sentimos la enorme necesidad de ingerir un chocolate o algo dulce.

Con la menopausia el cuerpo empieza a perder masa muscular y a ganar masa grasa, por lo que el metabolismo se hace más lento debido al decremento de tejido activo (músculo) el cual demanda mayor energía. En otras palabras, el cuerpo en esta etapa necesita menos calorías por día, sin embargo, según “Nutriología Médica” conforme aumenta la edad, disminuye también la actividad física, y en la mayoría de los casos la ingesta de energía sigue siendo igual, lo que lógicamente produce un aumento de peso considerable.

Se ha demostrado que a partir de los cuarenta, existe también una disminución de la tolerancia a la glucosa, lo que parece sugerir una cierta resistencia a la insulina, hecho que se puede evitar manteniendo un peso ideal y realizando ejercicio de manera regular.

Recomendaciones para no subir de peso durante la menopausia