Imprimir

 

Las reacciones dependen de la sensibilidad de cada persona al alergeno.


 Escrito para Fitness por Ana Cecilia Becerril

 Es una reacción exagerada de nuestro cuerpo a sustancias que generalmente no son dañinas.

La alergia es una hipersensibilidad a una particular sustancia que, si se inhala, ingiere o se toca produce unos síntomas característicos.

La sustancia a la que se es alérgico se denomina alergeno y los síntomas provocados son definidos como reacciones alérgicas.

Cuando un alergeno penetra en el organismo de un sujeto alérgico, el sistema inmunitario de éste responde produciendo una gran cantidad de anticuerpos llamados Inmunoglobulinas (IgE).

La sucesiva exposición al mismo alergeno producirá la liberación de mediadores químicos, en particular la histamina, que producirán los síntomas típicos de la reacción alérgica.

Cuatro componentes principales se requieren para que la reacción alérgica se desencadene:

ALERGENO: Sustancia causante de la alergia

INMUNOGLOBULINA E (IgE): Anticuerpo producido por el sistema inmunológico en respuesta al alergeno

MASTOCITOS: Células especiales que se encuentran en la piel y en órganos húmedos del cuerpo (nariz, ojos, boca), cargadas de gránulos de histamina

HISTAMINA: Sustancia que se libera en el proceso alérgico y que es la responsable de los síntomas de la alergia

Una reacción alérgica puede manifestarse de distintas maneras, lo síntomas pueden variar en función de la sensibilidad propia de cada persona.

La parte del cuerpo que entra en contacto con el alergeno juega un papel en los síntomas que se presentan. Por ejemplo:

Con frecuencia, los alergenos que se inhalan producen congestión nasal, picazón en garganta y nariz, producción de moco, tos.

Los alergenos que entran en contacto con los ojos pueden causar y provocar ojos pruriginosos o con comezón, llorosos, rojos e hinchados.

Comer algo a lo que se es alérgico puede causar dolor abdominal, cólicos, diarrea, náuseas, vómitos o una reacción grave y potencialmente mortal.

Los alergenos que entran en contacto con la piel pueden provocar erupción cutánea, urticaria, ampollas o incluso descamación cutánea.

Las alergias a medicamentos por lo general comprometen a todo el cuerpo y pueden llevar a una variedad de síntomas.

Algunas personas tienen reacciones similares a las alergias frente a las temperaturas cálidas o frías, la luz del sol y otros desencadenantes ambientales. Algunas veces, la fricción (el roce o golpes fuertes en la piel) producirá síntomas.

Una alergia específica por lo general no se transmite de padres a hijos (hereditaria). Sin embargo, si ambos padres tienen alergias, usted probablemente va a sufrir este problema. La posibilidad es mayor si es la madre quien sufre de alergias.

Algunas alergias, como por ejemplo la alergia al polvo, a los animales o a los alimentos, medicamentos, insectos pueden manifestarse durante todo el año.

Otras alergias, como por ejemplo la fiebre del heno (alergia al polen), aparecen sólo en determinados períodos del año.

Últimamente se están observando reacciones alérgicas que hasta el momento eran poco comunes, esto es debido a la introducción en nuestra vida cotidiana de materiales que hasta ahora no eran tan utilizados y extendidos niquel, latex, aleaciones, anisakis.

Las reacciones alérgicas graves (anafilaxia) requieren tratamiento con un medicamento llamado epinefrina, que puede salvar la vida del paciente si se administra inmediatamente.

En primer lugar, la mejor forma de reducir los síntomas es tratar de evitar lo que causa las alergias y esto es especialmente importante en el caso de las alergias a medicamentos y alimentos.

Hay varios tipos de medicamentos disponibles para prevenir y tratar las alergias. Qué medicamento recomiende el médico depende del tipo y severidad de los síntomas, la edad y la salud general.

Las enfermedades específicas que son causadas por las alergias (como asma, rinitis alérgica y eccema) pueden requerir otros tratamientos.

La prevención más obvia es procurar evitar la sustancia a la que se es alérgico, si ésta es conocida. Sin embargo, esta opción es a menudo difícilmente practicable, cuando no es imposible.

Los medicamentos más comunes para tratar las alergias son los Antihistamínicos, corticoides, cromoglicatos, inmunoterapia, factor de transferencia. La selección de uno o todos los medicamentos dependerá de la persona y la evolución de la enfermedad.