No te aflijas, la vida continúa, mantente activa para estar saludable.


 Por Antonia García Gómez

Entre los 45 y los 50 años de edad, la mujer inicia otra etapa de su vida biológica, el climaterio y con este la menopausia.

En esta etapa la mujer tiene una serie de alteraciones fisiológicas y psicológicas y la práctica de una actividad física le va a ser de gran ayuda.

Si no te has tomado en serio tu salud, también en esta etapa se manifiestan otras enfermedades como el cáncer de mama, problemas cardiovasculares, osteoporosis, obesidad, por mencionar algunas.

Lo ideal sería que hubiera una prevención para recibir cada etapa de la vida lo más sana posible, y no sentirse enferma o resultar enferma por no haber puesto atención y cuidar tu salud.

Los ejercicios aeróbicos son recomendables para obtener un mejor estilo de vida por largo tiempo (caminar, montar bicicleta fija o de montaña, nadar, tenis, básquetbol, clases de salón de aeróbicos por mencionar algunos). Combinar el ejercicio aeróbico con el ejercicio anaeróbico, te mantendrá saludable. Ejercitar los grupos musculares con resistencia, ayudan  a obtener tono muscular, que es el mantener a tus músculos en buena forma dando así mejor respaldo a tus órganos internos y a tus huesos, por lo que es recomendable después del ejercicio aeróbico, trabajar los grupos musculares con resistencia. De esta forma se adquirirá un balance en los dos sistemas de entrenamiento aeróbico y anaeróbico.

Si te encuentras en edad madura y no te has ejercitado nunca, uno de los ejercicios que puedes realizar es la caminata, bicicleta fija, y natación. Inicia poco a poco con tres veces a la semana, unos 30 minutos diarios, hasta llegar a una hora diaria por lo menos cinco veces a la semana.

El ejercicio en la etapa menopáusica te ayudará a aminorar los síntomas como cefaleas, reducir de peso en caso necesario, mejorar el sueño, bajar el estrés, cambiar colesterol malo por bueno, por mencionarte algunas molestias de esta etapa.

Una de las claves para obtener salud es la constancia, así que no decaiga tu ánimo. ¿Qué mayor motivación que tu salud para ejercitarte?

El ejercicio al aire libre es reconfortante, por lo que la caminata es ideal. Seguramente cerca de tu hogar habrá un parque donde practicarla.

Es importante mencionar que cuando te ejercitas aeróbicamente no debe faltarte el oxígeno, si esto sucede, bájale paulatinamente el ritmo a la actividad física que estés practicando.

También toma en cuenta que antes de iniciar cualquier actividad física se debe preparar a los grupos musculares para un trabajo mayor. 

Opciones de calentamiento de cinco a ocho minutos en el caso de la caminata:

  • Marcha en el lugar, moviendo los brazos
  • Abrir y cerrar las piernas, eleva brazos al frente
  • Combinación de ambos

Bicicleta

  • Incluye los movimientos anteriores
  • Después, pedalea ligero 

Después del calentamiento viene el ejercicio energético donde la intensidad es un poco más elevada. 

Al finalizar la rutina baja poco a poco la intensidad del ejercicio y finalmente estira para relajar a los grupos musculares. Se pueden repetir los ejercicios del calentamiento. De esta forma se elimina el ácido láctico que es el causante del dolor muscular al día siguiente. 

No olvides que es mejor ejercitarse de alguna forma, a no hacer nada,  para lograr un mejor estilo de vida hoy y mañana. Las ventajas son muchas al ponerte en movimiento. 

Recuerda, cuida tu cuerpo, que es tu casa...

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