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El consumo deficiente de este mineral puede repercutir en tu deseo sexual.


Escrito para fitness por Montserrat Astigárraga Serra

La sexualidad está muy ligada con nuestra alimentación. Esta ocasión hablaremos un poco sobre el zinc, un mineral que se encuentra en cantidades importantes en el aparato reproductor masculino.

Dicho mineral juega un papel importante en la producción de esperma y del fluido seminal, además participa en la síntesis de testosterona (hormona).  Es muy común que las personas no tengan una ingesta adecuada de zinc, pero seguramente desconocen en que esto puede traducirse en un descenso de la libido (deseo sexual).

Cabe mencionar que la carencia de zinc es frecuente en pacientes que se encuentran bajo diálisis renal. En un estudio, a 20 enfermos se les suministraron 50 mg de zinc; se observó un aumento significativo en los niveles de testosterona y una mejora considerable en el deseo sexual.

Ahora bien, el aporte aconsejado de zinc son de 15 a 20 mg al día. Es posible encontrarlo en fuentes naturales como ostras, almejas, carnes, productos lácteos, zanahorias y yema de huevo. Sin embargo dosis superiores a 150 mg al día pueden ser tóxicas e interferir con la absorción de otro mineral, el cobre del cual hablaremos en otro artículo.