Han surgido nuevas modalidades para fortalecer el sistema cardiovascular.


 Escrito para Fitness por Johann López

En los últimos años hemos visto que han surgido varias técnicas o adaptaciones al ejercicio aeróbico; las artes marciales no han sido la excepción con el surgimiento del cardio-kickboxing y el tae-bo.

El registro más antiguo que tenemos sobre las artes marciales se refiere a los templos budistas a fines del siglo XVII. Los monjes de aquellos templos diseñaron una serie de ejercicios físicos y mentales que les ayudaran a soportar las rigurosas pruebas de dolor y fuerza, así como para poder defenderse de las continuas invasiones de ejércitos extranjeros.

Posteriormente emigraron hacia china y de ahí hacia todo el Oriente.

Con la expansión de este ejercicio se fueron creando diferentes estilos y técnicas, los cuales fueron adquiriendo nombre propio como el karatedo, taekwondo, kun fu, lima lama y el Tjakai o kick boxing.

A través del tiempo estos estilos han sufrido modificaciones pues han tenido que evolucionar y acoplarse a las necesidades actuales, la mayoría han creado sus asociaciones mundiales y han implementado un sistema de competencia, el cual exige trabajar con alto rendimiento. 

Estas actividades tienen como objetivo primordial ejercitar la menta y el cuerpo. El karatedo, por ejemplo, tiene un lema que reza: "practicamos karatedo para una superación física y mental, el espíritu del karatedo es justicia, cortesía, constancia, tolerancia y respeto, en karatedo, no hay ataque intencionado sólo existe defensa". 

En el caso del cardio-kick boxing y tae-bo, su objetivo primordial es el de fortalecer el aparato cardiovascular así como el de desalojar todo el estrés acumulado durante el día mediante la realización de algunas técnicas de golpeo y pateo, siempre sin hacer contacto con algún otro compañero. 

También se ha comprobado que otra de las ventajas que tiene el practicar artes marciales a temprana edad es el de fomentar la disciplina y el de saber canalizar la energía, así como el de fortalecer el carácter.

El ejercicio a temprana edad se divide en dos grupos:

  • Pre-Karate, que es a partir de los tres y hasta los seis años. A esta edad más que enseñarles defensas y ataques se pone especial énfasis en el desarrollo de sus cualidades biomotrices.
  • A partir de los seis 1/2 años en adelante ya pueden tener formación más específica.

Hoy en día existen varios lugares o dojos donde se practican estas actividades y que están al alcance de todos, pero claro, siempre debemos asegurarnos que la persona que nos va a entrenar esté debidamente acreditada.

Scroll to top