Dos armas a tu favor, el ejercicio y la alimentación balanceada.


Escrito para Fitness por Nutrición Grupo Bimbo

Un estilo de vida saludable que incluye una alimentación correcta y la práctica diaria de actividad física, es una de las mejores estrategias para prevenir muchos padecimientos como la hipertensión, alteraciones en los niveles de colesterol y glucosa e incluso la obesidad.

En busca del colesterol bueno

El colesterol construye nuevas células y repara las dañadas, además es indispensable para la formación de las membranas celulares, hormonas (estrógenos, progesterona y testosterona), bilis y vitamina D. Pero la elevación del colesterol total por encima de 180 mg/dl aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular. 

Es importante que sepas que adicional al colesterol total, existen dos tipos de colesterol que debes tomar en cuenta:

Colesterol malo o LDL. Se eleva mediante el consumo excesivo de alimentos de origen animal altos en grasa como huevo, productos lácteos enteros y carnes rojas. Es “malo” porque se deposita en las arterias, lo que aumenta el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular. Mantener un nivel de colesterol LDL por debajo de 100 mg/dl protegerá a tú corazón.

Colesterol bueno o HDL. Evitar que el colesterol malo se pegue a las células y provoque daños en nuestro cuerpo. Se recomienda que los hombres mantengan un nivel mayor de 45 mg/dl y mujeres un nivel mayor de 50 mg/dl de colesterol HDL.

Cinco reglas de oro para fortalecer el corazón

  1. Menos estrés. Práctica yoga o ejercicios de respiración cuando menos 10 minutos al levantarte y otros 10 minutos antes de ir a dormir.
  2. 2. Procura no desvelarte. Dale la oportunidad a tu cuerpo de descansar, de tener un sueño reparador para recobrar tu energía para el siguiente día.
  3. 3. Ejercicio moderado. Realiza por lo menos 30 minutos de ejercicio aeróbico de tres a seis veces por semana, puedes salir a caminar, andar en bicicleta, subir las escaleras o practicar tu deporte favorito.
  4. Cuida el tipo de grasa que consumes
  • Incluye en tu alimentación grasas monoinsaturadas (aguacate, aceite de oliva) y alimentos con Omega 3 (linaza, salmón). Estos alimentos disminuyen el colesterol “malo” e incrementan el “bueno”.
  • Consume productos de origen animal bajos en grasas (productos lácteos descremados y carnes sin piel), además cuida los métodos de cocción que utilizas, prefiere asado, a la plancha, al vapor (limita el frito y capeado).
  1. Aumenta tu consumo de fibra
  • Consume verduras y frutas en cada comida, incluye dos veces a la semana leguminosas (frijol, lentejas), además selecciona derivados de cereales que contengan fibra como la Línea Doble Fibra Bimbo.

Ahora que ya sabes que la alimentación saludable y el ejercicio constante son dos armas contra el colesterol, ¡no dudes en utilizarlas!

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